miércoles, 8 de junio de 2011

El novio canadiense/cuento corto.

El Novio Canadiense

Renard Sans



Los minutos pasan, bueno, a veces el novio es quién se atrasa; además extranjero, bien pudo haberse perdido.

Micaela lo describió como el “non plus ultra”; por el que valió la pena esperar hasta sus cuarenta y tantos: pulcro, rico, honesto, amoroso, puntual y, sin embargo, no llega.

Quince minutos, media hora: El cura hace ver que tiene otro compromiso en la capilla.

La novia pidiendo paciencia. Sus familiares y amigos queriendo llamar al hotel; después de que ella dijese haberlo recogido en el aeropuerto un día antes.

Algunos empiezan a irse, la madre de la prometida llora. Su padre y hermanos furiosos e impacientes.

La lluvia cae, el maquillaje corre, los peinados se desvanecen, los almidonados trajes se arrugan. Los perfumes se evaporan. El sudor mancha. Las flores se marchitan, el ramo palidece.


Un fiasco. Micaela en trance, la mirada perdida. Micaela ríe histéricamente. Hace comentarios que no vienen al caso: bromas sin sentido. Llora. Autista.

Sus familiares buscan en los principales hoteles “al maldito”, y nada. Preguntan en la terminal aérea y su nombre no aparece. En Migración no hay registro. En los manifiestos de las aerolíneas: nada.

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